Cuida tu sistema inmunológico a través de la dieta

Los alimentos que incorporemos a nuestra dieta diariamente determinarán la fortaleza de nuestro cuerpo y de nuestro sistema inmunológico frente a los posibles agentes externos que puedan ser causa de los temidos resfriados.

La base de un sistema inmunológico fuerte debe regirse por una alimentación sana. En ella debe incluirse variedad de alimentos. Pasta, carne, pescado, hortalizas, verduras, frutas y lácteos. Con un consumo mayor de frutas, hortalizas y verduras.

La dieta es una parte imprescindible en la salud de las personas. Una dieta equilibrada, sana y completa puede ahorrarnos muchos problemas de salud. Si nuestro sistema inmunológico es o no suficientemente fuerte depende en gran medida de cómo y qué comemos, por lo que la dieta juega un papel fundamental.

Qué incluir en la dieta para fortalecer el sistema inmunológico

Las frutas deben estar presentes en nuestra dieta de forma destacada. Idealmente aportar cinco piezas diarias a nuestro organismo. Las frutas junto con las verduras son fuente de vitamina C. Vitamina imprescindible para un sistema inmunológico sano. Las vitaminas A y E así como flavonoides que contribuyen a la fortaleza del sistema inmunológico. Del mismo modo habrá que procurar que la ingesta de estas vitaminas se realice de una forma natural. Es decir a través de frutas y verduras y no de complejos vitamínicos, ya que serán absorbidos mejor por nuestro organismo.

En nuestra dieta también deberán incorporarse las proteínas que contienen los aminoácidos necesarios para que nuestro cuerpo fortalezca su sistema inmunológico. Y que encontraremos en las carnes magras, el pescado, los productos lácteos, legumbres o cereales.

Sistema inmunológico y formas de cocinar

El proceso del cocinado también juega un papel fundamental. Cocinar las carnes y pescados a la plancha en vez de fritos. Y las verduras tratarlas lo menos posible para evitar que pierdan sus propiedades. Son dos fórmulas clave. Consumir alimentos con exceso de aceite, mal cocinados o cocinados mediante procesos que alteren su composición puede suponer un problema. Porque de esa forma  perdemos gran parte de los nutrientes que nos aportaría.

El ajo ayuda al sistema inmunológico

Del mismo modo, hay que hacer una mención especial al ajo. El ajo tiene una sustancia llamada alicina, que es un protector natural de nuestra salud. Pero, ¿cómo cocinar el ajo para que la alicina no desaparezca? Para ello, tendremos que triturar o picar el ajo antes de cocinarlo, dejándolo previamente en reposo durante unos minutos. Así, nos aseguramos que las sustancias que nos protegen contra los resfriados no pierden su efecto. Por tanto, una dieta rica en frutas y verduras nos protegerá frente a los resfriados, pero no hay que esperar a tener un resfriado para incorporarlo a nuestra dieta.